Antes de empezar un viaje busco imágenes del lugar. Sí, sé que eso se carga parte del efecto sorpresa tan valioso, pero yo pienso en las posibilidades fotográficas del sitio. Ya sea para imitar grandes fotografías o evitar las típicas, me viene bien. El caso es que no encontraba casi fotos de las calles de Budapest.
De Budapest encontré muchísimas imágenes de las orillas del Danubio y las vistas de la ciudad, pero no de su «interior», por lo que tenía mucha curiosidad por andar en ella, contemplar los edificios y conocer la ciudad en sí.
Cómo son las calles de Budapest
Las calles de Budapest son una mezcla de historia y modernidad, de lo viejo y destruido. De lo nuevo y lo reconstruido.
Calles que son mezcla de señorío y ruina. De turisteo, mendicidad, de arte y de vida cotidiana de gente común. A veces, de reivindicación.
En las calles de Budapest hay gente de rasgos muy variados. A veces ves semblantes que parecen recién llegados de los Balcanes profundos. Y seguramente sea así. Otros mongoles y de otros rincones de Asia Central. Podrían ser del mismísimo Kirguistán. Otros probablemente gitanos, zíngaros. También rusos.
También hay «estilismos» de todo tipo, algo que hace los paseos más divertidos y variados. Modernos o hipsters se mezclan con los anclados en los años 80 o 90, los incalificables, los macarras, los hippies, los horteras, los antiguos, los artistas.
Y en las calles de Budapest hay muchos cables de tranvías y trolebuses, en una mezcla imposible y abundante de transporte público rápido y eficiente. Al menos a los que vivimos en Madrid, nos sorprende y recuerda a tiempos pasados.
Las calles de Budapest lucen entre las estatuas de bronce y piedra, enormes o pequeñas, de antes y de ahora. Neoclásicas, con reminiscencias del pasado comunista (aunque la mayoría de estas se las llevaron al Memento Park). Las últimas más realistas, como las que podríamos encontrar en muchas de nuestras ciudades…
Calles que lucen entre comercios nuevos y viejos. Esta mezcla que siempre está ahí, que de momento sigue siendo parte de la ciudad.
¿Triunfará alguna vez lo nuevo?
Si eso ocurre, se perderá parte o todo su atractivo, pero claro está que mejorará la calidad de vida/negocio de los que habitan en estos edificios. A buen seguro tienen más de un gotera.
Restaurantes y chiringuitos de todo tipo y tamaño en todas partes, ocupando esquinas y locales bajos, plazas y calles.
Mucha gente come a salto de mata, caminando o sentados en los bancos (¡aún hay bancos para sentarse en esta ciudad!). A cualquier hora, lo que no deja de sorprenderme.
Y los restaurantes italianos son los reyes de esta categoría. ¿Alguien me explica por qué hay tantísimos en Budapest? Aunque en ellos también se sirven gulash y otros platos típicos húngaros, en una especie de gesto proteccionista de la cultura local. Se agradece, oiga.
Son famosos los cafés y pastelerías de Budapest… hay muchos, y muy buenos. En el blog de Milviatges tienes un post con algunos 😉
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Las calles de Budapest pueden recordar a Praga, Palermo y al mismísimo Estambul
Sí, Budapest tiene un poco de otras ciudades. Pero son impresiones fugaces porque sabes que estás en Budapest. Porque el idioma húngaro te rodea, escrito y hablado. Porque tiene un no sé qué propio y claro, rotundo, suyo.
Y las calles de Budapest están llenas de edificios que guardan sorpresas. Enormes, bellos u horripilantes, de estilo art noveau y de estilo comunista. Incluso te puedes colar en las obras de un futuro hotel de lujo donde hay un alucinante hall con cúpula de cristal y hierro forjado.
Algunos lugares imprescindibles
Aunque perderse por las calles de Budapest, caminando sin rumbo fijo, es lo mejor, aquí tienes algunos lugares emblemáticos a los que te recomiendo ir:
La Avenida Andrassy
Con su boulevard central que te permite ir mirando a ambos lados de la calle sin romperte el cuello, porque hay que mirar hacia arriba casi constantemente y no te lo quieres perder, la Avenida Andrassy es realmente especial.
La Plaza de los Héroes
Allí donde termina la citada Avenida, está la Plaza de los Héroes. Es inmensa y tiene un conjunto de estatuas envidiable. Impresiona.
El barrio judío de Budapest
Las calles del barrio judío de Budapest están gobernadas por las cúpulas de la Gran Sinagoga, en cuanto hay un poco de horizonte.
Fíjate en una cosa muy curiosa. Los ruidos típicos de una ciudad parece que no están, que se amortiguan por no se sabe qué almohadillas. Será que los coches no utilizan sus bocinas, que la gente no habla en voz alta como nosotros, o qué sé yo. Pero en muchas ocasiones, a plena luz del día, no hay sensación de ruido a tu alrededor.
Una ciudad que invita a la calma, el paseo y a la introspección, sí.
En fin, las calles de Budapest puede que sean las grandes olvidadas, pero no se lo merecen. Y que conste que me encantaría ver cada atardecer frente a ese río majestuoso 😊
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Hola Alicia; Te agradecería si pudieras comentar algo sobre el tema del cambio de moneda en Budapest. Mi mujer y yo vamos en unos dias y me gustaría evitar la mala experiencia que tuvimos en Praga en lo que se refiere a cobro de comisiones absolutamente desmesuradas.
Muchísimas gracias
Hola! En Budapest cambié en las casas de cambio del centro sin problemas. Por este y otros viajes, te cuento que evites cambiar en el aeropuerto, hoteles, y pagar con tarjeta de crédito porque es donde te cobran comisiones abusivas, por lo general. Si no cambias en España una pequeña cantidad para ir del aeropuerto al centro, hazlo allí al llegar, pero lo justo!