Hacía tiempo que anhelaba encontrarme con la estampa más famosa de Girona: las casas de colores sobre el río Oñar. A poder ser, cámara en mano al atardecer. Lo que no lograba es hacerme una idea de lo que hay detrás de ese muro de viviendas. Y mira tú por dónde que gracias a una de esas carambolas de la vida, coincidí con el festival Temps de Flors. Una preciosa Fiesta de la Primavera.
Mi primera visita a Girona en un momento tan especial como el Temps de Flors (Tiempo de Flores)
Os decía que no lograba hacerme una idea de lo que hay detrás de ese muro de viviendas de colores que miran al río. Busqué algo por Internet, pero no lo encontré.

Puede ser que sea porque es difícil fotografiar su casco medieval de calles tan angostas. O que no busqué bien. Por otro lado, tenía que ir por trabajo, y no podía escoger las fechas. Coincidir con el Temps de Flors fue un acierto y una pequeña pena, porque vi la ciudad en uno de los momentos más especiales del año, pero no en su esencia del día a día.
¿Qué es el Temps de Flors, y por qué visitarlo?
Podemos denominarlo Festival, aunque ellos lo llaman Exposición… Una exposición de flores y últimamente otras manifestaciones artísticas.
El primer Temps de Flors se realizó en el año 1954. Fue un pequeño evento realizado en el Ayuntamiento de Girona. Lo que empezó siendo un Concurso Exposición de Flores a nivel provincial, promovido por jóvenes de la ciudad, terminó en una cita internacional.
Lo curioso y bonito de la historia es que desde el principio hasta ahora el Temps de Flors lo hacen los vecinos.


Grupos, asociaciones, la comunidad de un bloque de viviendas, comerciantes… Cada uno, en la esquina de la ciudad que quiere o que le toca, aporta su trabajo de decoración. Sólo desde el año 1992 el Ayuntamiento se implica en la organización de la Exposición.


Por otra parte, aunque empezó como tal, desde hace ya muchos años no es un concurso, solamente una exposición. Esto también tiene su punto. La gente lo hace porque quiere, porque le apetece, por puro placer. Me gustan estas cosas que se hacen sin esperar nada a cambio :)

¿Merece la pena visitar Girona durante la Exposición Temps de Flors?
Es la única vez que la he visitado (de momento), pero diría que rotundamente SÍ.
Aunque haga mucho calor, aunque el evento concentre a mucha gente (demasiada en algunos momentos), es muy recomendable.

Porque el color y el arte en la calle lo merecen. Porque se abren patios y jardines que normalmente están cerrados al público. Y porque si te gusta la fotografía, este es un gran momento para disfrutar y llevarte un buen puñado de bonitas tomas.
Total, que no te irás de vacío nunca.

Consejos para ir a Girona en el Temps de Flors
Recomiendo llegar a Girona un día antes del comienzo del Temps de Flors para ver cómo se prepara la exposición. Mientras unos se encaraman a escaleras de mano, otros paran a admirar su trabajo, felicitarles, preguntarles… Es una buena forma de «calentar motores» y por qué no, de hablar con los artistas.

Aunque la Exposición se mantenga durante unos 10 días (incluyendo dos fines de semana), es mejor si vas al principio, porque las flores están más frescas. Y como curiosidad, añadiré que un taxista me dijo que suele ir menos gente el fin de semana que entre semana. Yo no lo entendía, incluso se lo hice repetir. ¿Cómo que hay menos visitantes en fin de semana? Pero aseguró que es así, porque los días laborales se llena de autobuses de excursionistas.
Aunque sea una obviedad, debes reservar el alojamiento con bastante antelación (meses). La ciudad se llena a tope y los precios de los hoteles suben mucho. Haz lo mismo con los restaurantes si quieres ir a comer o cenar a alguno en particular. Por cierto, que la oferta de restaurantes y bares de Girona es muy buena y no excesivamente cara.
Vete con buen calzado, gorra, protección solar, y cámara de fotos.

Añade una buena dosis de paciencia. Como ya he dejado caer, cada año acuden más visitantes al Temps de Flors. Girona se llena de autobuses de excursionistas de un día, y de turistas que pernoctan.

Hay momentos en que la calle es un río de gente que puede agobiar, y para entrar en algunos lugares como los Baños Árabes tendrás que madrugar mucho, o dejarlo para otra visita, como hice yo. Nada es perfecto, y a mucha gente le gustan las mismas cosas. Además ya he dicho también que esta fiesta tiene alcance internacional. Por ejemplo, a los japoneses, como buenos amantes de la decoración floral, les encanta.
¿Y de Girona, qué?
Con o sin Temps de Flors, esta ciudad te deja con la boca abierta. Tiene mucho, mucho más que la postal de las casas de colores asomándose al río. Sólo puedo resumirlo porque mi experiencia no fue la típica que hubiera tenido en cualquier otro fin de semana.

La muralla de Girona
Me encantó, simple y llanamente. Se puede recorrer en varios kilómetros mirando a la ciudad desde arriba y las montañas que la rodean. Una construcción de origen romano que fue ampliada en la Edad Media.

Dicen que estos tramos de muralla carolingia (s. IX) son los más largos de Europa. Desde luego es un imprescindible de Girona.


El casco medieval
Lleno de vida con cuidados comercios y restaurantes, es impresionante. Callejones, recovecos, cuestas arriba y abajo, iglesias encajonadas.
El cine ha parado más de una vez por aquí. Películas como El Perfume y series como Juego de Tronos han encontrado en Girona buenos escenarios.

La única tarde que pude pasear por allí, antes de que la ciudad se llenara, fue genial. Tranquilidad y un aura de laberinto misterioso envuelven a cualquier paseo.

Podemos incluir aquí la ampliación de la Rambla, que aparte de ser una avenida donde se concentran bares y restaurantes, tiene unos espectaculares soportales en uno de sus lados. Y ahí, mirando en sus techos, encontraréis un mapa de París antes de que se construyera la Torre Eiffel.

La Catedral de Santa María
Está en el punto más alto de la ciudad y luce una espectacular escalinata. Durante el Temps de Flors no se puede ver bien, porque siendo este un punto central de la ciudad, se engalana.
Yo esperaba flores pero me encontré con una instalación de espejos que desconcertaba un poco. Al final dio juego para hacer(se) fotos ;)



Lo mejor, desde mi punto de vista, está sin embargo en el interior del templo.
Dicen que es la primera catedral gótica, con una nave en vez de tres, porque los arquitectos de aquél entonces tardaron mucho en ponerse de acuerdo. Y resulta que esta nave barroca es la más ancha del mundo (23 metros).

Hay que pagar entrada, pero durante el Temps de Flors es posible entrar en determinados momentos del día a la nave.

Muy cerca está el Jardín dels Alemanys (jardín de los Alemanes)
Un curioso nombre para un lugar con mucha historia. Claro que cuando conoces esa historia, el nombre ya no es tan curioso.
Resulta que aquí se instalaron los soldados mercenarios alemanes destinados a Girona durante la guerra con Francia. Un capítulo de la historia de la ciudad en el siglo XIX.


Aún se puede pasear entre los muros de lo que fue el cuartel donde se alojaban, subirse a la torre y disfrutar de la sombra de los árboles. Durante el Temps de Flors se llena de instalaciones y gente, mucha gente…
El barrio judío de Girona
Llamado Call, está próximo a la Catedral (bueno, todo está cerca), y es uno de los mejor conservados de España.
Los judíos, unas 600 almas de media, no llegaron a superar el 10% de la población de Girona. Su barrio era como un área independiente y se les llamaba los «servirey» porque servían a los reyes y pagaban muchos impuestos.

A partir del siglo XIV una sucesión de desgracias asolaron la ciudad: la peste, malas cosechas… y se les culpó, empezando a haber ataques o pogromos a esta comunidad. Llegaron a ponerles una identificación ¿Os suena?
La postal más famosa de Girona
No me olvido, no. La verdad es que es una estampa muy bonita. Ir y venir por sus puentes, desde el de piedra hasta el de Hierro, construido por la empresa del señor Eiffel, ya es un placer. De esos sitios en los que no te cansas de mirar, buscar perspectivas, pisarlo en diferentes momentos del día, aunque sin duda el atardecer es el mejor.
Por cierto que hay unos cuantos bares y restaurantes en esas casas de colores desde donde tomarse algo sin perder las vistas. Pero eso ya lo descubriréis cuando vayáis :)



Un último consejo: no sólo la ciudad, también la provincia de Girona guarda un montón de secretos y no tan secretos a visitar. Los amigos del blog Saltaconmigo, por ejemplo, han publicado ya unos cuantos posts sobre sus atractivos: Olot, Figueres, la comarca de la Garrotxa…
Caerán más escapadas por allí, seguramente :)
➡️ Este post contiene enlaces a sitios afiliados. Esto significa que si haces una reserva desde dichos enlaces, yo ganaré una pequeña comisión. En ningún caso tú pagarás más y en alguno conseguirás un descuento, como en IATI Seguros. Puedes leer más en este artículo.
La verdad que visitar Girona en Temps de Flors es un acierto, como bien dices puedes visitar patios o lugares que no suelen estar abiertos al público, incluso entrar en todos los museos gratis. Lo que si, voy a discrepar con el señor taxista, muuchisima más gente el fin de semana que entre semana. Mejor si se puede ver entre semana y hacia última hora de la tarde o casi noche porque los autobuses de turistas ya se han marchado y solo quedan los locales. Muy bonitas fotos hiciste, y una pena que no pudieras entrar en los baños árabes, preciosos con flores y sin flores :)
oh! gracias!!! pues habrá que hacerte caso! Volveré para ver esos baños árabes y los museos y demás encantos con la tranquilidad que se merece, seguro :)
Un abrazo