Lanzarote es una de las islas más extrañas y bellas de nuestra geografía. Buena parte de su territorio está cubierto de campos de lavas negras, grises, rojas, amarillas e incluso azules, producto de las erupciones volcánicas del pasado. Para ayudar a organizarte, voy a destacar 11 lugares que ver en Lanzarote. Es una lista subjetiva e incompleta, pero son los que yo no me perdería bajo ningún concepto.
Mis 11 lugares que ver en Lanzarote, ordenados por preferencia
Rocas retorcidas, superficies en las que no se puede andar por lo enrevesado de sus perfiles afilados, cortantes. Es pura belleza árida en la que sólo algunas playas de arena se abren paso en las costas. A pesar de ser una especie de desierto, Lanzarote es una isla llena de sitios que pueden llenar tu agenda para una semana o más.
Aquí tienes el listado de los sitios de los que voy a hablar, por si te lo quieres llevar contigo 😉
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Una buena opción es alquilar un coche para recorrer Lanzarote. Si, por el contrario, no quieres conducir, puedes visitar muchos de los lugares de los que te hablo apuntándote a tours que puedes encontrar en Civitatis.
Parque Nacional de Timanfaya
Estar en Lanzarote es vivir sensaciones extrañas. Las que transmite una tierra extraña, como de otro planeta. Y lo sientes al máximo en el Parque Nacional de Timanfaya.
Es cierto que hoy en día sólo se puede visitar en autobús, sin poder apearte en ningún momento, por razones de conservación.
Y aunque sea realmente frustrante no poder andar por allí, la experiencia de contemplar durante una hora y media el fantástico paisaje sigue siendo casi “religiosa”. No te digo más, que yo me emocioné en determinado momento y tuve que ajustarme las gafas de sol para que no se notara.
Si quieres saber más, no te pierdas mi experiencia e información de la visita al Parque Nacional de Timanfaya que puedes leer aquí.
Ruta de la Caldera Blanca
Una de las opciones para quitarte la espinita de ver más de cerca estos paisajes es hacer una caminata por los aledaños del Parque Nacional de Timanfaya.
Yo opté por la ruta de la Caldera Blanca que te cuento en detalle aquí, ya que es accesible en transporte público. Tengo que decir que es una maravilla, por eso se queda en este honroso segundo puesto de mi lista de lugares que ver en Lanzarote.
Te resumo un poco: esta ruta te lleva hasta el mismo borde del cráter de la Caldera Blanca, todo un señor volcán de tonos amarillos y beiges que se alza frente a una gran colada de lava negra.
El camino transcurre en medio de dicha colada o malpaís, y es realmente fantástico andar por allí a solas, o casi a solas, ya que no es uno de los sitios más visitados de Lanzarote. De verdad, no te la pierdas.
Playa de Famara
Siguiendo la línea de la costa oeste de Lanzarote llegas a la Playa de Famara. Bueno, no sé si hay un acceso directo, yo fui desde Arrecife cruzando el interior de la isla.
El caso es que esta playa es alucinante. Podría poner todos los adjetivos que quieras.
Impresionante, increíble, maravillosa, bellísima. No tanto como lugar de baño (es una meca surfera, lo que significa muchas olas), sino como paisaje que te deja con la boca abierta.
Desde allí tienes una gran perspectiva de los riscos de Famara, y cuando baja la marea todo se refleja en la arena mojada. Dicen que las puestas de sol son lo más, y me lo creo.
Un consejo: no dejes de pasear por el pueblo, ni de comerte un buen pescado en alguno de sus restaurantes.
Mirador del Río
Pensaba incluir en esta lista a la isla de La Graciosa, pero pensé “ojo, no es Lanzarote”, así que tiene su propio espacio en este blog (enlazado en el nombre).
Lo que sí incluyo en este listado es el Mirador del Río. Este es un lugar que se asienta en lo más alto de los acantilados de Famara, justo enfrente de La Graciosa.
Las vistas desde allí son soberbias, si no hay niebla, nubes o mucha calima. En mi caso el día no estaba completamente despejado pero La Graciosa se dejó ver. Además se pueden ver unas antiguas salinas que hay al pie de los riscos, y los campos de lava que se extienden a la espalda.
Ojo, en el Mirador del Río hay un centro de visitantes y restaurante que cobra entrada, pero si no quieres pagarla, no tienes por qué renunciar a las vistas ya que te puedes asomar justo al lado. Eso sí, son un poquito «peores».
Teguise, quizá el pueblo más bonito de Lanzarote
Pongamos un poco de contraste a tanto paisaje de esos que no se olvidan. La villa de Teguise fue capital de Lanzarote hasta 1847 y hoy es un pueblo bonito, bonito.
Un perfecto ejemplo de la arquitectura tradicional de la isla que tanto recuerda a la de algunos lugares de Sudamérica como podría ser Quito.
Si te gustan las puertas y ventanas, éste es tu sitio. Con los colores blanco y verde por bandera.
Y si buscas tranquilidad y poca gente, te sugiero que evites el domingo, que es día de mercadillo, o que esperes a la tarde de dicho día. Pernoctar allí también sería un buen plan 🥰
Cueva de los Verdes
Volvamos a las maravillas naturales de Lanzarote. Aunque me acerqué a esta visita con un punto de escepticismo, salí encantada de la vida.
La Cueva de los Verdes es una gran oportunidad para conocer las profundidades del mar de lava que ocupa buena parte de Lanzarote.
Está bien preparada para la visita y bien iluminada, algo que no siempre se encuentra en las cuevas acondicionadas para el turismo. Definitivamente, tiene que entrar en tu lista de lugares que ver en Lanzarote.
Jardín de Cactus
Yo no sé a ti, pero a mí me encantan los cactus. Son tan extraños como fotogénicos, y la variedad de especies es enorme.
El gran César Manrique, artista lanzaroteño, concibió su última obra aquí, en una antigua cantera que hoy llaman Jardín de Cactus. Como en la mayor parte de su obra quiso poner en valor la riqueza de su tierra y en este caso la idea fue hacer un homenaje a parte de la flora de Lanzarote.
En el Jardín de Cactus de Lanzarote te vas a encontrar con cientos (sí, cientos) de especies distintas de cactus de todo el mundo, no sólo de la isla. Dispuestos en una especie de teatro circular, que era la antigua cantera, el lugar está hecho para gozar con la vista y una vez más con la cámara.
Si quieres saber más del Jardín de Cactus, o ver más fotos, no te pierdas el post que le dediqué.
Laguna de los Clicos o el Charco Verde
Otro rincón de Lanzarote, y de nuevo en la costa oeste, es la Laguna de los Clicos o el Charco Verde, aunque también lo puedes encontrar buscando Charco de los Clicos, Laguna Verde… Será por nombres 😎
Este rincón tan singular está dentro del Parque Nacional de Timanfaya y hoy en día, debido a la gran cantidad de visitantes, sólo se puede ver desde un mirador habilitado a tal efecto.
Hace muchos años, cuando fui con mis padres y no había ni la mitad de gente que hoy, llegamos hasta la orilla.
En cualquier caso la visión de ese lago, laguna o charco de color verde intenso, rodeada de un antiguo cráter volcánico, es arrebatadora. Tanto como su entorno.
La Geria, un paisaje con mucha historia
Tras la última gran erupción volcánica, los campesinos de Lanzarote tenían que reinventarse. Sus tierras habían quedado cubiertas por un manto de rocas volcánicas que nada prometían. Sin embargo, descubrieron que esta tierra guarda toda la humedad en el subsuelo, y se pusieron manos a la obra.
El cultivo tradicional de la vid se hizo posible cavando minicráteres o conos invertidos, y levantando muretes a su alrededor para proteger las plantas de los fuertes vientos que asolan la isla.
No hace falta regar, y de hecho este es un lugar que incluso hoy en día tiene una gran escasez de agua potable.
Este cultivo es tan inteligente como valiente. Todo ha de trabajarse a mano. Bajando esos metros cavados en la tierra para luego subir con la carga de la uva. Lo mismo para podar y para cavar. Y todo esto impide hacer grandes producciones de vino. Un vino exquisito, por cierto.
Los humanos nos sorprendemos a nosotros mismos una y otra vez.
Los Hervideros, una costa indomable
En la Costa de la Lava, en las estribaciones sureñas del Parque Nacional de Timanfaya y casi de la isla, se alzan Los Hervideros.
Como si de una obra humana se tratara, la costa se ve esculpida con columnas de basalto y cuevas naturales en las que rugen las olas cuando hay temporal. De ahí el nombre.
Mi paso por allí fue demasiado fugaz, pero no por ello voy a dejar de incluirlo entre los lugares que ver en Lanzarote porque de verdad es un paisaje impresionante.
Las Salinas de Janubio
El último lugar que quiero destacar en esta lista de lugares que ver en Lanzarote, es una pequeña frustración personal.
Sólo pude contemplarlo rápidamente y desde lejos, pero que sepas que las Salinas de Janubio se pueden recorrer con una visita guiada.
Si hubiera tenido un día más, le habría dedicado el tiempo que se merece, así que desde aquí te digo: no lo dejes pasar.
Hemos llegado al final de mi selección de lugares que ver en Lanzarote. No están todos, claro. Faltan algunos importantes que estaban cerrados por la pandemia de covid cuando yo fui, como la Casa de Saramago y la Fundación César Manrique. Me supo mal perdérmelos, la verdad. También hay otros que no pude visitar por falta de transporte público ¿Has visitado Lanzarote? ¿Sería esta tu lista?
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