Hoy os traigo un post diferente a lo que suelo publicar en este blog. Y nunca mejor dicho lo de “diferente”. Hace un tiempo decidí que ya iba siendo hora de dar algo de difusión a esos proyectos locales solidarios que merecen atención. Uno de los que más de cerca me tocan es el de Diferentes.leyu.
Su principal artífice, Yolanda Serrano, gran persona, fotógrafa, viajera y gran persona (sí, otra vez), fue compañera de viaje en el 2008 a Mali y Burkina Faso. Desde entonces nuestra amistad ha quedado tan impresa como las vivencias de aquellos días por el África más alucinante que he conocido.
Cada vez que voy a la ciudad donde reside intento quedar con ella, comer o cenar en su compañía y la de otros amigos, y hablar de viajes, de Diferentes.leyu, y de lo que caiga.
Como os decía quiero empezar a dar voz, poquito a poco, a esos proyectos solidarios que hay por el mundo. Tratando de hacer de éste un sitio mejor y más humano. Más justo, más feliz.
Quiero hablar de proyectos locales porque las grandes asociaciones tienen muchas luces y creo que son necesarias. Pero también tienen sombras de gran calibre puesto que los recursos que manejan son enormes. Sé que el día a día es duro para todos, pero para las grandes lo son algo menos.
También porque estoy convencida de que las acciones de tipo local, los “microproyectos”, muchas veces son más efectivos y eficientes. Sé que como todo en esta vida, hay de todo, así que voy a hablar sólo de los que conozco personalmente. O de los que sé que los llevan personas íntegras.
Por qué quiero hablar de Diferentes.leyu
En el caso de Diferentes.leyu, casi asistí a su nacimiento. En nuestras conversaciones Yolanda me contaba de la necesidad y la idea que tenía de poner en marcha un proyecto. Del país elegido, de los objetivos al principio más soñadores y después más definidos.
Siempre con pasión, con amor. Hasta que un día me contó la gran noticia: que se ponía a hacerlo.
Ella fue tanteando, escuchando, hablando, equivocándose, cayéndose y levantándose. En definitiva, aprendiendo. Me consta. Fue (y es) apoyada por amigos, familia y el para mi también querido Toni, su pareja.
La gran noticia es que con el paso de los años el proyecto de Diferentes.leyu se está haciendo realidad, se ha hecho realidad. Ni que decir tiene que me alegro muchísimo, me admira y me emociona.
Sin más preámbulos, os dejo con la entrevista a Diferentes.leyu:
¿En qué consiste el proyecto Diferentes.leyu?
Diferentes.leyu nace con la misión de mejorar la calidad de vida de niños y niñas etíopes que padecen algún tipo de discapacidad física o mental.
Para cumplir nuestros objetivos estamos colaborando y dando apoyo a proyectos ya establecidos en la propia Etiopía.
A largo plazo, nuestro sueño es poder construir y equipar un hogar para niños con dicho tipo de discapacidades.
Actualmente, somos responsables del mantenimiento económico de un “aula especial” que ha impulsado y gestiona la Comunidad Misionera de San Pablo Apóstol en la localidad etíope de Muketuri.
Muketuri es una región considerada como una zona de “inseguridad alimentaria”. Los niveles de desnutrición infantil dificultan el crecimiento físico y psíquico de los más pequeños. A las carencias nutricionales se suma también la problemática social ocasionada -y agravada por la pobreza y la falta de conocimientos- del rechazo a las personas con discapacidades. No suelen ser aceptadas por sus familias y comunidades desde el mismo momento de su nacimiento. Las creencias populares les atribuyen ser producto de maldiciones o castigos divinos.
Cuando una familia tiene algún hijo con discapacidad, trata de ocultarlo o no le presta los cuidados necesarios. La falta de recursos y su visión como una pesada carga de un miembro “improductivo” para la familia empeoran la situación de estos niños y niñas.
Para intentar paliar estas circunstancias e inventar vencer las barreras de estas diferencias, en la medida de nuestras posibilidades, surge el “aula especial de Muketuri”.
Este espacio acoge durante durante el día a seis niños con diferentes discapacidades. En el aula los niños son alimentados, bañados y cuidados.
Además el aula conlleva un programa nutricional, una vez al mes, proporcionando alimento a 72 bebés que sufren desnutrición y a gemelos. Nosotros, una vez conseguidos los fondos para el mantenimiento anual del aula, destinamos el resto de fondos a este programa.
Paliar la desnutrición, como en muchos otros lugares, es crucial puesto que muchos recién nacidos, y especialmente en el caso de los gemelos, los hace muy vulnerables debido a las carencias en su propia dieta y en la de sus madres.
Dicho problema es mucho más crítico en el caso de las madres que tienen gemelos recién nacidos. Ellas se ven imposibilitadas de alimentar a dos bebés al mismo tiempo, lo que acaba poniendo en riesgo la vida de al menos uno de ellos.
También se proporciona alimento y vitaminas a las mujeres embarazadas y se apoya a personas que padecen casos de pobreza extrema o enfermedades graves que no pueden ser tratadas en el centro local de salud.
¿De dónde viene el nombre?
De la propia diferencia que surge en el trato a las personas que son “diferentes”. Se trata de una diferencia que nos viene marcada por el destino o por nuestro lugar de nacimiento.
Los peques a los que dirigimos nuestros esfuerzo son tratados de manera diferente respecto a cómo sería tratado un niño sin tales problemas o discapacidades. Nuestros niños y niñas en Etiopía deben superar la “diferencia” con las que la vida les ha marcado.
En nuestro país hemos superado muchas barreras al respecto -aunque aún queda mucho camino por recorrer-. No obstante en zonas de África debemos redoblar tales esfuerzos para que estas personas puedan ser aceptadas y vivir con dignidad. Esas diferencias son lo que les hace “Diferentes” para nosotros.
Cabe añadir que la palabra “Diferentes” está presente constantemente en nuestro día a día. Leyu, significa diferentes en amárico -la lengua oficial más hablada en Etiopía-. Nuestros amigos cuando pronuncian “diferentes” añaden Leyu leyu. Es una manera de tener presentes a los peques.
¿Por qué Etiopía?
Creo que cada ser, además del lugar donde le ha tocado nacer tiene un lugar en este mundo. Etiopía era ese lugar donde siempre quise ir y cuando llegué por primera vez en 2005, confirmé que era donde quería estar. Después en años sucesivos, dentro de una búsqueda personal de dar sentido a todo lo que la vida me regalaba y regala, de coincidir con personas y amigos que me mostraron el camino, reafirmaron que era el lugar.
¿Quiénes lo conformáis?
Por estatutos Neus P. como secretaria y mi mano derecha, Xavi L. como tesorero, dos nuevos vocales M. Angeles B. Y Jordi R., y yo como presidenta.
Como colaboradores que nos prestan su ayuda de diferentes maneras nos gustaría citar a los fotógrafos de Paifer que donan un tanto por ciento de sus trabajos. A la Guardería Blau que se hermanó el año pasado con el aula especial de Muketuri. La Pizarra de Raimunda -un colectivo de señoras maravillosas cuyas edades rondan entre los 60 y 91 años- que realizó una preciosa campaña el año pasado “Tejiendo solidaridad 2015”. Y el Restaurante etíope “Addis Abeba” en Barcelona que nos cede su espacio para las cenas de Diferentes y para otras iniciativas. Y los más importantes, nuestros amigos y familias que desde el principio nos han apoyado.
¿Cómo nació el proyecto, cuándo, y cuál ha sido vuestra trayectoria?
Tras casi cuatro años dedicando un puñado de días de mis vacaciones junto a Xavier L. para ayudar en el pabellón de niños Diferentes de la Casa Madre Teresa de Seddiskilo en Addis Abeba, donde conocimos la problemática de los niños “Diferentes”, decidimos que focalizaríamos nuestros esfuerzos en luchar por estos niños que habitualmente son desterrados socialmente y considerados como malos espíritus y seres que no sirven para nada.
Con este objetivo, y para canalizar más eficientemente las ayudas económicas que nuestros familiares y amigos nos proporcionaban altruistamente, decidimos crear la Asociación en 2009.
En el intervalo entre aquel año y hasta 2013 -fecha en que llegamos a Muketuri- entregamos nuestra ayuda en diferentes (¿ves la palabra?) asociaciones y entidades donde había algún peque con discapacidad. Eran ayudas de poca relevancia material porque apenas teníamos fondos pero que estaban cargadas de muchas ganas de ayudar y mucha ilusión.
En 2013, Neus y yo recorrimos diversas poblaciones y visitamos varias asociaciones en busca de peques Diferentes. Y así fue como llegamos a la Comunidad Misionera de San Pablo Apóstol en Muketuri.
Desde entonces, Muketuri y su aula especial ha sido un regalo, un premio. No sé, encierra todo en lo que creímos cuando empezamos. Este será nuestro tercer año colaborando allí, y ahora ya podemos decir que el Aula es nuestra, se mantiene gracias a los fondos que entre todos llevamos hasta allí.
¿Cuáles han sido las principales dificultades para desarrollarlo?
Cuando te embarcas en algo como Diferentes, no tienes ni idea de los pasos a seguir. Te mueves por las ganas de ayudar con el corazón y no engañar a nadie, por lo menos en nuestro caso. Así que cada paso, cada contratiempo es un aprendizaje.
Esos pasos nos han hecho comprender que hay que dar tiempo al tiempo. Sólo puedes confiar en tus recursos y no en las falsas promesas.
La burocracia es tremenda para emprender nuevas iniciativas que partan de cero. Apoyar a pequeños o medianos proyectos ya en marcha puede ser una excelente alternativa para conseguir nuestros retos.
Quizás la mayor dificultad sea el conseguir un cambio cultural para desterrar prejuicios y creencias muy arraigadas que impiden que las personas con discapacidades sean completamente aceptadas, sin tener que ser discriminadas o abandonadas.
Se trata también de restituir su dignidad como seres humanos… pero bueno, en eso estamos.
¿Cómo os financiáis?
Hoy por hoy, la principal forma de financiación es a través de los eventos y campañas que se van realizando. Las ayudas que nos hacen llegar nuestros colaboradores y las cuotas que diversas personas ingresan en la cuenta de Diferentes. Además tenemos una página abierta en Mi grano de Arena donde cualquier persona puede lanzar un reto para recaudar fondos para Diferentes.
Si me dejas quisiera explicar esto de las cuotas.
No son socios, ya que esto implicaría girar recibos y desgravaciones fiscales. La desventaja de girar un recibo radica en que la entidad bancaria percibe una comisión por cada recibo emitido.
Respecto a la desgravación fiscal sólo podremos emitirla cuando tengamos el reconocimiento de la asociación como bien social.
Por todo ello, las personas que quieran contribuir pueden rellenar un formulario que les facilitaremos. Este impreso se lleva al banco donde se da la orden de que se ingrese en la cuenta de Diferentes la cantidad elegida y por el período que se desee.
¿Hay algún tipo de requisito para colaborar con vosotros? ¿aceptáis voluntarios, de qué tipo y para qué?
Requisito ninguno. Se aceptan ideas, propuestas, campañas, etc. Quizás el único requisito sea que quien desee colaborar contacte con nosotros y a partir de aquí se trata de llevarlo adelante. Somos un grupo reducido y si es una iniciativa que coincide con la línea de trabajo de Diferentes lo apoyaremos.
Sobre el tema del voluntariado, nosotros no lo gestionamos. Las personas que deseen colaborar aportando sus conocimientos y su trabajo sobre el terreno, pueden ponerse en contacto con la Comunidad Misionera de Muketuri.
¿Demostráis de alguna forma que la ayuda llega, cómo?
En Diferentes apostamos claramente por la transparencia y el rendimiento de cuentas. Date cuenta que la mayor parte de los fondos recaudados proceden de familiares, amigos y conocidos. En nuestro blog se pueden consultar al detalle todos los presupuestos y fondos entregados en cada anualidad.
Además, Neus y yo viajamos cada año hasta Etiopía para comprobar que las cosas siguen adelante y conocer las necesidades a afrontar para el próximo ejercicio. Durante nuestro viaje -y siempre que el wifi y las conexiones lo permiten- vamos informando “in situ” con noticias e imágenes a nuestros seguidores a través de nuestra página de Facebook.
Precisamente durante los dos últimos años se han sumado a nuestros viajes nuevos amigos que desean conocer el proyecto.
Como decía Vicente Ferrer “la mejor manera de demostrar que la ayuda llega, es que alguien vaya y después lo transmita”
No se trata de viajes solidarios, ni nada por el estilo. Se trata de un pequeñísimo grupo de personas que nos acompañan. Cada uno -incluidas nosotras- se costea los gastos y tramita el viaje.
Eso sí, si alguien viaja a Etiopía y quiere acercarse al proyecto para conocerlo, puede ponerse en contacto con nosotros vía email y le informaremos.
¿Cuál es la “última hora” del proyecto?
La última hora es que este año se ha iniciado la construcción de una casa para una de las cuidadoras del aula.
En esta casa se construirá una habitación donde ella conviva y trabaje con alguno de los niños que necesite un mayor cuidado o pueda acoger provisionalmente a otros niños que lleguen al aula. Nuestra cuidadora, Sohaye, será la encargada responsable de estos cuidados.
En el mes de Mayo empezará la construcción de dos pozos de agua para unas cinco familias, entre cuyos miembros se hallan niños que padecen desnutrición y que reciben ayuda del Plan de nutrición del aula.
¿Qué planes de futuro tiene Diferentes.leyu?
El principal plan de futuro es seguir manteniendo el aula especial. Si no llegamos al presupuesto de cada año, el aula tendría que cerrarse. Así que, de momento, ése es nuestro objetivo principal.
Si los fondos siguen aumentando -como ha sucedido durante el último año- nos plantearemos continuar y ampliar la construcción de pozos de agua para apoyar el plan de nutrición del aula.
Todo ello, sin descartar nuestro sueño de seguir haciendo hucha para conseguir levantar ese hogar soñado para niños Diferentes que mencionábamos al principio. Pero esto a muuuuuuuuuuuyyyyyyyyyy largo plazo.
Si alguien quisiera emprender un proyecto local de características similares… ¿qué 3 consejos le darías?
- Honestidad siempre, para quienes colaboran y con los principios del proyecto.
- Adaptación a las necesidades locales, no a lo que tú crees que es prioritario.
- Ilusión a tope para perseverar porque nada es fácil. De cada revés y de cada fracaso se aprende y también se sale reforzado.
Y la última, no por ello menos importante: Un motivo para ayudar a Diferentes.leyu
¿Un motivo? Aquel que cada uno encuentre será importante. La cuestión es querer y no simplemente tener un motivo. El nuestro es que seguimos confiando en que las diferencias se pueden salvar.
Si te ha resultado interesante este proyecto y quieres seguirlo, e incluso apoyarlo, no dudes en contactar con ellos a través de su página de Facebook y de la página web de la asociación.
P.D. No descarto acompañar (si me acepta) a Diferentes.leyu a Etiopía en una de sus expediciones. De hecho llevo pensándolo ya -demasiado- tiempo :)
Muchas gracias por vuestro tiempo y fotografías, chicos, y en especial a ti, Yolanda. Y… ¡adelante!
Alicia, guardo tu resumen de nuestro viaje a Mali y Burkina, entonces ya me parecio increíble tu forma de recordar lugares y situaciones. Desde entonces ha pasado tiempo, de tantas cosas buenas que proporcionar viajar, es conocer gente como tú. Gracias en nombre de Diferentes.leyu y en el mio… que te quiero.
Gracias a ti, y a Diferentes.leyu, por hacer de este un mundo mejor con vuestro granito de arena. Yo también te quiero, y es un honor tenerte como amiga, compañera de viaje, y lo que se tercie. Volveremos a caminar juntas, en Etiopía y espero que en más lugares. Un abrazo grande!
¡Qué dura puede ser la realidad de los diferentes! En nuestro viaje por Latinoamérica nos hemos encontrados demasiados diferentes sin ningún tipo de atención… Esperemos que en Etiopía siga llegando esa ayuda que ellos brindan con el proyecto. Y mola la nueva sección!! Basta de viajar por sólo viajar!!
Gracias Álex!! sí, por desgracia los Diferentes siempre lo tienen peor… incomprensión, contextos de existencia dura para todo el mundo y donde los más débiles o que pueden suponer una carga por su «improductividad» como bien señala Yolanda lógicamente salen perdiendo…
Un abrazo!
Alicia
Gracias por nombrarnos en esta magnífica entrevista Yolanda, ya sabes que colaboramos gustosamente con vosotros, que creemos en Diferentes Leyu y que lo único que sentimos es no poder hacer mas de lo que hacemos, pero todo se andará, y solo añadir que estamos de acuerdo con Alicia cuando habla de GRAN PERSONA, sin olvidar a Xavi L. y Neus H. a los que conocemos y también merecen este reconocimiento.
Gracias por tu comentario, Joan!! Un placer que estéis aquí, y que os conozca la gente :)
Otro viaje que tengo pendiente, Etiopía, y no se me olvidará toda la gente de este magnifico proyecto. Gracias por compartirlo y por darlo a conocer!
Gracias Isabel!! Besos!